Mercedes Young no tuvo miedo de dejar su vida en el vibrante país de Panamá para perseguir sus sueños. Una vez que se lo propuso, el único resultado posible para ella era tener éxito.
Ahora, es presidenta de la Cámara de Comercio Hispana de Tampa Bay y directora ejecutiva de Vivid Consulting Group, una empresa que brinda topografía, cadena de suministro y otros servicios para proyectos de construcción.
Young vivió los primeros cinco años de su vida en un pueblo rural de Panamá, que carecía del lujo y los rascacielos conocidos en otras partes del país. Cuando llegó el momento de comenzar la escuela, su familia la llevó a la ciudad de Panamá, un paisaje muy diferente al que estaba acostumbrada.
El viaje le cambió la vida, pues marcó el inicio de lo que es hoy su carrera.
"Miré (los edificios) y dije: 'Voy a hacer uno de esos algún día", dijo Young.
Sin embargo, el comienzo de su carrera fue algo diferente de lo esperado.
Young fue a la Universidad de Panamá para estudiar psicología, lo que la llevó a trabajar con niños con necesidades especiales en el Departamento de Defensa de los Estados Unidos durante cuatro años. Luego, Young se casó y tuvo hijos antes de ser nombrada directora de Mary Kay Cosmetics durante 14 años.
Ella viajó mucho ya que su entonces esposo, quien también trabajaba para el gobierno, era estacionado alrededor del mundo. Ha estado en 22 países, siendo Turquía su favorito debido a su libertad de religión, expresión y raza.
No fue hasta que ella y su familia decidieron establecerse en los E.E.U.U. que sufrió un verdadero choque cultural.
“Primero el idioma era difícil. Entonces, tuve que volver a la escuela nocturna para tomar ESL”, dijo Young. “En segundo lugar, la mentalidad, desde la familia hasta la sociedad. Hay mucha segregación en este país y hay segregación en nuestros países también, pero se trata más de clases sociales sobre el cual tienes control, pero no de raza que es muy diferente”.
“Ni siquiera sabía que era negra hasta que llegué aquí. Pensé que solo era hispana y panameña”.
Sin embargo, se describe a sí misma como una persona que no le teme a la vida y se esfuerza al máximo para tener éxito.
“Cuando me fui de Panamá tomé la decisión de que iba a venir aquí a triunfar, eso era todo, no había otro tema, simplemente iba a crecer”, dijo ella.
Ahora, como directora de dos importantes organizaciones en Tampa Bay, Young ha desarrollado una rutina equilibrada entre su vida personal y su trabajo.
Se despierta a las 5 a.m., medita durante 15 minutos, luego hace ejercicio y realiza su rutina de cuidado personal “muy estricta”. Toma su té y responde correos electrónicos de trabajo mientras escucha la meditación. Tan pronto como se sube al auto para ir al trabajo, llama a tres personas en su vida para decirles que está pensando en ellos, una tradición que ha tenido durante más de 13 años. Dependiendo del día, se dirige a la sede de Vivid o a la oficina de la Cámara.
Otra tradición que tiene es que una vez a la semana empaca algunas bolsas con suministros esenciales y conduce por la ciudad para dárselos a personas sin hogar.
“Pensar que alguien está en la calle sin refugio para mí es horrible, por eso apoyo constantemente a esa comunidad”, dijo.
Esta rutina diaria lo es todo para ella, ya que la salud física y mental “van de la mano”.
“Este equilibrio es muy importante para poder servir de manera efectiva”, dijo Young.
Tiene un grupo de amigas con las que viaja cuatro veces al año y un grupo de parejas que van juntos de crucero. Le encanta la música y siempre baila mientras prepara la cena.
“Para mí, divertirme y reír es como el antídoto que me mantiene joven”, dijo ella.
Como mujer hispana negra, describe que ha tenido que luchar por su espacio y tiempo en la industria, lo que a menudo ha sido un desafío. Ha tenido contratistas a los que ha contratado personalmente preguntándole qué está haciendo en construcción, que debería estar vendiendo maquillaje y que su piel se ve como si nunca hubiera hecho nada en su vida.
“Solo les digo que recuerden que soy yo quien está escribiendo sus cheques”, dijo Young.
Ella atribuye su éxito a su perseverancia y disciplina que la han ayudado a aprender y adaptarse a su entorno y a mantener su posición no solo como mujer, sino también como hispana y negra.
Con la cabeza sobre los hombros, les recuerda a sus hijos que los privilegios que tienen son los sueños de una familia que dejaron atrás y que, en muchos sentidos, son una inspiración para ellos.
“Eso para mí es muy importante: las mujeres que represento”, dijo ella. “Cómo me comporto, cómo me presento, mi energía, me tomo todo eso muy en serio porque represento a todas las mujeres del mundo de alguna manera”
La importancia de esta conexión humana es lo que la llevó a ocupar su puesto en la Cámara de Comercio Hispana.
Muchas empresas en Florida tienen al menos una mano hispana, dijo Young, sin embargo, la mayoría son solo proveedores de servicios en lugar de ser dueños de negocios reales.
En respuesta, se compromete a proporcionar a los miembros de la Cámara todos los recursos y la información que necesitan para tener éxito, incluyendo cómo hacer propuestas, asociaciones, contratos y cómo desarrollar una empresa.
En cuanto a cómo Tampa ha mejorado las oportunidades para los hispanos, dice que ha mejorado un 100%. Sin embargo, reconoce que aún queda mucho trabajo por hacer.
“El área de mejora es que nosotros, como dueños de negocios hispanos, nos demos cuenta de que hay lugar en la mesa para nosotros. Hablamos dos idiomas y venimos de diferentes culturas, entonces tenemos mucho que aportar a esta cultura”, dijo Young.