TAMPA - Martin Gramatica ya estaba trabajando como locutor de los Buccaneers, trabajando con una compañía de imágenes médicas y entrenando fútbol juvenil cuando recibió la llamada. La Liga Nacional de Fútbol Sala venía para Tampa Bay y quería que él entrenara a los equipos masculino y femenino.
“Mi equipo de fútbol juvenil hizo nacionales, así que estábamos en Colorado”, recordó Gramatica. “Lo primero que dije fue, ‘Mire, estoy haciendo demasiado, estoy ocupado.’ Estoy entrenando a mis hijos. Hago la radio de los Bucs en español. Trabajo en una compañía de imágenes médicas donde hago escaneos preventivos. Estoy ocupado.”
Gramatica se preguntaba cómo iba a poder añadir a un nuevo equipo profesional a su agenda. Sin embargo, mientras más lo pensaba, el ex pateador de los Bucs se preguntaba cómo iba a dejar ir esa oportunidad. Era un puesto que combinaría dos de sus más grandes amores: fútbol y Tampa Bay.
Así que Gramatica hará su debut como entrenador de los Tampa Bay Strikers el domingo, cuando jueguen contra Columbus (Georgia) Rapids a las 2 p.m. en el Yuengling Center en el campus de USF en Tampa para empezar su primera temporada.
Ambos equipos (masculino y femenino) jugaran cada fecha agendada. El juego presenta reglas únicas como cuartos de 15 minutos, con cinco jugadores y un portero con un campo de 200 pies de largo.
“Para los fans casuales, se parece mucho al hockey,” dijo Gramatica. “Así que los fans a los que no les gusta el fútbol, tendrán la oportunidad de enamorarse del fútbol sala… Es un ritmo muy rápido, y hay muchas anotaciones.”La ida y vuelta rápida de este deporte le recuerda a Gramatica al baloncesto también.
“Cada jugador ataca, cada jugador defiende,” dijo él. “No es como, oh, eres delantero, así que te sientas allí y esperas a que te llegue la pelota, porque eso no va a suceder. Tienes que volver y defender.”
“… Por eso creo que los fans casuales lo van a amar y que los fans del fútbol van a amar el hecho de que tenemos la oportunidad de ver un tipo de fútbol diferente, pero todavía es fútbol. Así que va a ser emocionante poder llegar a una audiencia más grande.”
Aunque es reconocido por sus 10 años en la NFL, Gramatica nació en Argentina y el fútbol fue su primer amor. Eso duró hasta después de que su familia se mudara a Florida cuando tenía 9 años y empezó su trayecto para convertirse en un placekicker en el fútbol americano.
Después de sus días de juego, Gramatica se unió a la comunidad de fútbol en Tampa Bay, en donde crecieron sus hijos. Él empezó a entrenando a sus hijos, quienes ahora juegan en equipos sub-19, y a su hija de 11 años.
Para entrenar a los niños de West Florida Flames East Lake, el programa de fútbol juvenil donde ha sido entrenador durante los últimos años, él se basa en su experiencia en la NFL y en los entrenadores para los que jugó.
“Especialmente en Tony Dungy,” dijo Gramatica sobre el ex entrenador del Salón de la Fama de los Bucs. “Lo primero que les digo [a los jugadores] es que tenemos las mismas reglas que teníamos con Tony Dundy. No tenemos excusas ni explicaciones. Esas son las reglas con las que vivimos.”
Gramatica conocía a muchos de los jugadores que aplicaron para los Strikers por su experiencia entrenando a equipos de fútbol juveniles en Tampa. Él dijo que le llamó mucho la atención que el equipo incluiría jugadores locales.
Los Strikers tuvieron pruebas abiertas en Tampa Bay durante el verano y otoño para crear su lista de jugadores. La lista de 19 jugadoras del equipo femenino incluye a Madison Cox, miembro del equipo nacional de Puerto Rico y exalumna de la Universidad de Tampa, además de la jugadora de USF Bri Blethen. El equipo masculino incluye varios residentes del Tampa Bay, incluidos Skylar Wilks, quien jugó en Florida Gulf Coast University, y Hermon Constant, quien jugó en Saint Leo University.
“Lo mejor de todo y al final la razón principal por la cual tomé este trabajo fue que [ellos] querían talento local,” dijo Gramatica. “No estamos reclutando personas de Europa o Sur América. Estamos tomando personas locales que han jugado o en la universidad o en el sistema juvenil. Ellos son jugadores que viven en Tampa Bay y este es su hogar.”
“Eso lo hizo muy interesante para mí porque quiero que los locales que tienen esa meta [continuar jugando fútbol] vean ese camino y digan, ‘Miren, si jugué localmente, y jugué en universidades locales, hay una oportunidad de jugar fútbol sala en mi ciudad natal.’”
“… Yo nunca hubiera tomado este trabajo si me hubiera hecho mudarme de Tampa,” continuó él. “Si este trabajo fuera en Orlando o en Fort Myers, o en cualquier otro lugar, hubiera dicho que no. Este es mi hogar. Así que la oportunidad de quedarme en mi hogar y entrenar a un nivel profesional y entrenar a jugadores de Tampa, eso fue lo que más me emocionó.”
Detalles de los partidos
Contra Columbus (Georgia) Rapids, dos partidos el domingo (masculino y femenino).
En el Yuengling Center en el campus de USF Tampa.
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