CLEARWATER- "Como pan caliente" es una expresión que significa que algo es popular o tiene mucha demanda. Esa es la frase que describiría la venta de productos de la famosa panadería mexicana '5 de Mayo', en Clearwater.
Las tortillas y los tamales fueron base en la alimentación de los mexicanos por siglos, pero los españoles fueron quienes introdujeron el trigo a México y con ello la elaboración del pan. Luego los mexicanos desarrollaron la industria panadera y la variedad de formas, ingredientes y sabores que, hoy por hoy, conforman la famosa panadería mexicana.
Aunque el consumo del trigo nunca ha superado al del maíz en México, ambos granos están bien arraigados en la alimentación mexicana. Por ello desde la época colonial, la costumbre de ir a comprar el pan o esperar al panadero ambulante que pasaba diariamente por los vecindarios quedó impregnada en la sociedad mexicana hasta nuestros días.
En 1998 y con esa visión, 'Don Julio' Pimentel Noyola y su esposa Rosa, originarios de Querétaro y Puebla, respectivamente, se dieron a la tarea de darle a los mexicanos de Clearwater un pedacito de México en forma de pan, pasteles y repostería fina.
Desde las 8 a.m. con el pan recién horneado, la panadería 5 de Mayo, localizada en el 1254 S Highland Ave, transporta aromas de vainilla, mantequilla y azúcar que atrae el olfato de los vecinos y clientes que comienzan sus jornadas.
Pimentel, de 66 años, contó que llegó a Estados Unidos hace más de tres décadas.
"Llegué en 1988 inicialmente a Los Ángeles, California", dijo Pimentel. "Y me tocó la última amnistía".
Pimentel nació en Querétaro y vivió en México, DF y en Zamora Michoacán, donde elaboraba dulce de camote (batata), dulce de calabaza y palanquetas.
"Era dulcero que es otro de los oficios tradicionales en México", recordó Pimentel. "Mi hermana tenía una panadería, en donde también trabajé. De ahí aprendí el oficio de panadero, por herencia familiar, porque me gustaba y porque vi que era un negocio noble que me ayudaría para el futuro".
En Los Ángeles, Pimentel comenzó a trabajar en el campo y fue visualizando lo que quería hacer. Conoció a Ricardo Montero, quien fue el primero que abrió la panadería '5 de mayo', porque él también había trabajado en panadería.
"Viví también en Texas y me rondaba la idea de poner una fábrica de tamales. De pronto, conocí a una persona que surtía ingredientes mexicanos en Texas y en Florida. Le pedí que me trajera. Esa persona es muy conocida aquí en Tampa: es el señor Guillermo Gama, dueño del Restaurante Mirasol, en Plant City, a quien le estaré siempre agradecido" explicó Pimentel.
Trabajó como mayorista de productos mexicanos en el área y Montero trabajaba como panadero con él.
"Me di cuenta de que poner una panadería era más viable que una fábrica de tamales. Así que seguí mi visión", dijo Pimentel.
Montero, de 54 años, comenzó a amasar pan en su casa. Adaptó un cuarto con horno y Pimentel le ayudaba.
"Así empezamos a hacer el pan y él salía a vender en las calles en Clearwater, como se acostumbra en México", dijo Pimentel.
Al poco tiempo Montero encontró el local que ocupan hoy, localizado en un lugar donde habitaban residentes mexicanos, provenientes del estado de Hidalgo.
Eventualmente Montero se fue a Georgia a probar suerte, dejando la panadería en manos de su hermano Libni Montero y de Pimentel, quienes levantaron la producción.
Hoy la panadería '5 de Mayo' ocupa 4 locales, dos son para el "amasijo", como se le denomina a la zona de preparación, y los otros dos para la venta o servicio al cliente. El negocio es fuente de trabajo para 15 personas, que en su mayoría son parte de las familias Pimentel y Montero, pero también han dado trabajo a colombianos y venezolanos recientemente.
"Se toma su tiempo entrenar laboralmente a una persona de otro país que no conoce el producto, pero es también parte de nuestra contribución y gratitud a la comunidad hispana local" dijo Pimentel.
Anabel Hernández, originaria de Durango y residente de Clearwater dijo que "todo está delicioso" en el lugar.
"He pedido churros, buñuelos para eventos y algunas amigas han comprado tamales y son muy buenos. Además, dan buen servicio, entregan a tiempo y ofrecen buena presentación de sus productos", aseguró Hernández.
En cuanto al nombre "5 de mayo", Pimentel dijo que "queríamos encontrar un nombre que atrajera como negocio mexicano y '5 de mayo' suena mucho hasta para los americanos. Así que nos funcionó muy bien el nombre".
Alejandra Macías, nuera de Pimentel, es administradora de la panadería.
"A mi parece muy bonito trabajar aquí y agradezco la confianza que se me ha brindado, pero realmente, Don Julio es quien ha logrado todo lo que somos ahora", dijo Macias. "Hacemos un promedio de 60 pasteles diarios y más de 220 rebanadas de pastel. El fin de semana tenemos más trabajo por las fiestas y producimos de tres pasteles de 13 pisos, pasteles grandes, como para quinceañeras y bodas".
En el recorrido por la variedad de panes, Pimentel explicó acerca de los olores y texturas y variedades.
"Aquí tenemos las tradicionales conchas (de vainilla y chocolate); cuerno de danés (pan de migajón); las novias, "las piernas de pollo", pan tapado, cemitas, galleta de chochitos, los yoyos, (cubiertos con chantillí y rellenos de guayaba); panqué chino, mantecadas, cariocas, rebanadas, el bísquet, la magdalena, pan de canela, panqué con pasas y churros, roles de canela con glass, cortadillo (relleno también), los marranitos, las piedras y los panes cacahuates (rellenos de una mezcla de mantequilla con chantillí)", enumeró Pimentel mientras pasaba por las vitrinas.
Destacó que, en la repostería cuentan con donas, polvorones, galletas y pan de hojaldre relleno con varios sabores: queso, fresa, durazno, piña, guayaba con queso.
"También tenemos la telera y el bolillo que son panes salados utilizados principalmente para la elaboración de sándwiches o tortas. Y por supuesto, ofrecemos los panes de días festivos como son la rosca de reyes y el pan de muerto", enfatizó Pimentel.
En cuanto a la oferta de servicios, Macías indicó que ofrecen servicios complementarios: como envío de dinero a México, elaboración de piñatas, servicio de banquetes con comida auténtica mexicana como: barbacoa de borrego, tamales y mole poblano.También ofrecen "pastes", tradicionales de la región de Pachuca Hidalgo, que son empanadas rellenas de carne y verduras."
"Este 5 de mayo, estaremos ofreciendo degustación de tamales y atole todo el día" señaló Macías sonriendo.
Para Pimentel el negocio es la culminación de años de lucha.
"Todo es cuestión de poner el empeño y tener determinación. Se van a tropezar con muchas cosas, para mí fue el idioma, por eso es importante el trabajo en equipo para que nos complementemos, y así cada miembro aporta un valor. Este es el país de las oportunidades y sí se puede", afirmó Pimentel.
***
El cinco de mayo en la panadería tendrán degustación gratuita de tamales y atole mexicano y especiales durante todo el día.
***
MÁS NOTICIAS: https://www.centrotampa.com/