En el mundo del arte y la cultura, pocos proyectos logran combinar la educación y el entretenimiento de manera tan magistral como “La Cata Musical Venezolana”, una iniciativa creada por el músico y escritor venezolano César Muñoz. Este domingo 26 de enero, Tampa será el escenario de esta singular propuesta, que busca destacar la riqueza musical venezolana y ofrecer un espacio de conexión emocional para la comunidad hispana e internacional.
César Muñoz, conocido por su prolífica carrera como productor musical, escritor y humorista, conversó con CENTRO Tampa para compartir detalles exclusivos de este evento y reflexionar acerca de su papel como difusor de sus tradiciones culturales. Con un enfoque en la música como vehículo de identidad y memoria, el artista destacó la importancia de mantener viva la esencia de su país por medio de la música en tiempos de cambio y migración.
El origen de La Cata Musical Venezolana
“Desde que inventé el concepto de La Cata Musical, mi intención ha sido sensibilizar a las personas acerca del mundo de la música y destacar la profundidad de nuestras tradiciones culturales”, explicó Muñoz al hablar acerca del origen de esta iniciativa.
“La versión venezolana busca resaltar nuestro acervo cultural, que muchas veces se percibe de manera superficial pero que es uno de los mayores tesoros que poseemos.”
La idea central del evento radica en presentar la música como una experiencia sensorial y educativa. Muñoz subrayó que la cata musical no es un espectáculo convencional, sino una experiencia de introspección y conexión.
“El protagonista no soy yo y creo que tampoco el público; el verdadero protagonista es la música”, enfatizó.
Desde su creación, esta propuesta ha evolucionado, adaptándose a diferentes contextos y audiencias. Cada presentación demuestra el más puro deseo de Muñoz de construir un puente cultural entre Venezuela y el mundo, resaltando los valores y tradiciones que definen a tierra natal.
La receptividad del público estadounidense
Aunque Muñoz ya había visitado Tampa en el pasado, esta será la primera vez que presentará su cata musical en la ciudad. Sobre la acogida del público hispano en Estados Unidos, compartió: “Ha sido muy grata. El público experimenta una sensación de plenitud al descubrir y celebrar lo que compartimos en estos eventos.” Para el músico, esta experiencia trasciende el entretenimiento, ya que permite a los asistentes reconectarse con sus raíces culturales y compartirlas con otros.
En tal sentido, Muñoz destacó el valor de llevar la música venezolana a audiencias variadas, incluyendo no solo a venezolanos en la diáspora, también a personas de otras nacionalidades interesadas en conocer la riqueza cultural del país venezolano.
“Un país no existe solamente en su geografía; también vive en su historia, su cultura y en la forma en que esta une a su gente,” afirmó.
El público también se ha mostrado curioso por las historias y anécdotas que Muñoz comparte durante sus presentaciones. Estas narraciones encarnan la riqueza del repertorio musical venezolano y le permiten a la audiencia comprender el contexto histórico y cultural en el que estas canciones surgieron. Es esto precisamente lo que refuerza el impacto educativo de La Cata Musical.
Selección del repertorio musical
Uno de los retos más significativos para Muñoz ha sido seleccionar las canciones y géneros que forman parte del show.
“Es un proceso complejo porque uno quisiera hablar de todo, pero eso requeriría un curso universitario. La selección se basa en la relevancia histórica y mi experiencia personal,” explicó.
El repertorio incluye obras emblemáticas de figuras como Simón Díaz, Álvaro Romero y Billo Frómeta, así como temas del folclore y de la escena pop venezolana.
Cada pieza musical que fue seleccionada tiene un significado especial y busca conectar al público con momentos clave de la historia musical del país suramericano. Además, Muñoz integra elementos de improvisación durante sus presentaciones, permitiendo que cada evento sea único y adaptado a la dinámica de la audiencia.
Los desafíos de llevar las tradiciones al extranjero
Organizar eventos de esta naturaleza fuera de Venezuela presenta varios desafíos, entre ellos, mantener la firmeza emocional durante las actuaciones.
“Al principio me costaba mucho porque remueve fibras muy personales. Sin embargo, cada vez logro compartirlo con mayor profundidad”, confesó Muñoz.
Otro reto ha sido adaptarse a la diversidad del público internacional, afirma.
“En Venezuela, uno se siente en código con el público. Pero fuera, uno debe establecer nuevas conexiones, un lenguaje distinto y adaptarse, construir puentes culturales,” explicó.
La logística también representa un desafío significativo, ya que cada escenario y cada ciudad tienen particularidades que requieren atención. Desde los detalles técnicos hasta la comunicación con los organizadores locales, cada elemento debe coordinarse para garantizar una experiencia inolvidable para el público.
La evolución de La Cata Musical
Desde su primera presentación, La Cata Musical ha evolucionado significativamente. Para Muñoz, este proceso ha sido tanto personal como profesional.
“Cada vez que realizo este evento, profundizo más en su esencia. Es un viaje interno que enriquece cada presentación,” comentó.
Sin embargo, tiene en claro que el escenario internacional presenta muchos más retos y el hecho de presentarse ante un público distinto implica de mucha más atención.
"No considero esto una clase de historia donde se abarque cada detalle, y aceptar esa limitación ha sido un desafío. Además, este trabajo involucra una vulnerabilidad especial, ya que toca fibras personales profundas de los venezolanos donde me presento. El reto constante radica en permanecer conectado a la autenticidad necesaria para transmitir esta experiencia. Es crucial ofrecerla con la misma intensidad y sinceridad en cada escenario.", dijo el artista. Esta constante evolución garantiza que el evento permanezca relevante y emocionante para audiencias de todas las edades y procedencias.
Para esta presentación en Tampa, Muñoz compartirá el escenario con Wattaka, un grupo vocal que rescata el contrapunto y las tradiciones musicales de Venezuela.
“Es un lujo contar con ellos, ya que su trabajo enriquece la experiencia y resalta la tradición coral venezolana,” afirmó el músico.
Wattaka se ha destacado por su dedicación a preservar y difundir el repertorio musical venezolano, especialmente a través de interpretaciones que combinan técnica vocal y pasión. Su participación en La Cata Musical agrega una dimensión única al evento, resaltando la versatilidad y de la música venezolana y su profundidad en cuanto al manejo de la música coral y de su sistema de orquestas.
La música está servida
“Es fundamental conocer nuestra historia y amar nuestras tradiciones, porque solo así podemos mirar hacia adelante con firmeza.”
“Yo digo que es el mejor momento para mí para hacer este espectáculo. Primero, porque es una forma de estar cerca de mi gente. Lo otro es que lo que yo estoy proponiendo es que no olvidemos quiénes somos, de dónde venimos, cuál es el tesoro cultural que tenemos. Debemos sentirnos orgullosos acerca de eso,” dijo Muñoz.
“Es necesario en estos tiempos que vivimos los venezolanos, en cualquier lugar del mundo, que cada uno se conecte con sus tradiciones y su identidad. Precisamente para hablar acerca de la reconstrucción de nuestro país y para recordar el hilo narrativo de lo que hemos sido, debemos rescatar todo ese conjunto de historias y vivencias culturales, todos lo tenemos que hacer desde nuestros espacios y yo, desde mi trinchera que es la música, lo hago para que no olvidemos las cosas hermosas y aquello que nos conecta con lo más elevado, lo más sublime y lo más preciado que tenemos como venezolanos,” agregó.
Con cada acorde y cada narración, La Cata Musical se erige como un espacio donde la música se convierte en el hilo conductor de una historia que vive en la memoria de quienes la llevan consigo, trascendiendo fronteras. Tal como lo afirmó el director de orquesta británico, Leopold Anthony Stokowski: “La historia de un pueblo se canta en su música”. Estas palabras encuentran eco en cada nota interpretada por César Muñoz, quien lleva al público en un recorrido que conecta pasado, identidad y esperanza.
“Es que la música es historia, van de la mano,” enfatizó. En tiempos de sobreinformación y desconexión, La Cata Musical actúa como un anclaje a lo esencial: rescatar la tradición y reafirmar las raíces culturales.
El domingo 26 de enero, el HCC Performing Arts de Ybor City, se transformará en un espacio donde las melodías se degustarán como un fino vino. Cada nota será un tributo a las raíces que unen a los venezolanos y una invitación para que la comunidad conozca y celebre las historias que definen a un país a través de su música.
INFO BOX
La Cata Musical Venezolana
Dónde: HCC Performing Arts Ybor City, Tampa, FL
Cuándo: domingo 26 de enero, 5:00 p.m.
Tickets: De $50 a $65
Info: lacatamusical.com.