TAMPA — Cirque Dreams Holidaze, que combina las artes circenses con un estilo teatral similar al de Broadway, se presentará en el Straz Center los días 26 y 27 de diciembre.
Entre los más de 30 artistas que dan vida a esta producción se encuentra Lucas Suárez, un joven argentino cuya trayectoria ilustra el impacto y la perseverancia de los artistas hispanos en la industria circense internacional.
Con 325 trajes confeccionados a partir de más de 300 rollos de tela, esta producción visita 60 ciudades en solo seis semanas. La historia de Suárez, un acróbata especializado en equilibrios de mano y pole aéreo, enriquece el espectáculo con un contexto de esfuerzo, resiliencia y dedicación que conecta con cada miembro del público.
Cirque Dreams fue creado en 1993 por Neil Goldberg, un visionario productor y director estadounidense. Goldberg desarrolló la franquicia con la intención de combinar las artes circenses contemporáneas con elementos teatrales, música y narrativas imaginativas, logrando una experiencia única que cautivó a audiencias de todo el mundo.
Desde entonces, millones de personas alrededor del mundo han disfrutado de las producciones de Cirque Dreams. Y fue en 2007 cuando comenzó a presentarse la producción navideña con temática invernal.
Para 2018, esta prestigiosa franquicia pasó a formar parte del Cirque du Soleil Entertainment Group.
Trayectoria de un soñador
Nacido en 1997 en Buenos Aires, Suárez descubrió su pasión por el circo a los 7 años. Inicialmente, incursionó en el fútbol argentino, pero no obtuvo los resultados esperados. Fue entonces cuando comenzó su camino en la acrobacia bajo la guía de sus mentores Mauricio Macu y Hernán Darío Gay, quienes lo inspiraron a explorar su potencial. Durante su adolescencia, combinó su formación circense con la gimnasia competitiva, una disciplina que le enseñó la importancia de la dedicación, precisión y resiliencia.
“Desde niño siempre supe que quería dedicarme al escenario. Tuve mentores excepcionales que me enseñaron no solo las técnicas, sino también el amor por este arte”, dijo Suárez.
A los 16 años, buscó mejorar con entrenadores internacionales, lo que lo llevó a Montreal, donde perfeccionó su técnica bajo la tutela de expertos.
Suárez trabajó durante cinco años en cruceros, realizando espectáculos que le dieron presencia escénica y experiencia frente al público. En particular, formó parte de Celebrity Cruises, incluyendo los innovadores barcos Celebrity Apex y Celebrity Beyond, donde integró los elencos inaugurales. Esta experiencia fue clave para desarrollar su creatividad, adaptarse a diferentes audiencias y perfeccionar su versatilidad como artista.
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FOTOGRAFÍA CORTESÍA DE VSTAR ENTERTAINMENT GROUP
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Desafíos físicos y emocionales
En 2015, Suárez enfrentó uno de los momentos más desafiantes de su vida cuando sufrió una fractura en la pierna durante una competencia nacional de gimnasia en Mendoza, Argentina. El accidente, causado por las exigencias extremas de la disciplina, le dejó un pronóstico inicialmente desalentador: los médicos advirtieron que incluso caminar nuevamente podría ser complicado. Sin embargo, lejos de desanimarse, decidió enfrentar esta prueba con la misma determinación que caracteriza su carrera.
Durante su recuperación, contó con el apoyo de su familia y mentores, quienes se convirtieron en pilares fundamentales en su camino hacia la rehabilitación. Suárez dedicó meses a sesiones de fisioterapia y entrenamientos adaptados, no solo para recuperar la movilidad, sino para regresar más fuerte que nunca al mundo del circo.
"El diagnóstico inicial fue duro, pero siempre creí que podía superarlo. Fue un proceso largo, pero me permitió redescubrir mi fuerza física y mental", expresó.
Este episodio marcó un punto de inflexión en su carrera. Al superar esta lesión, no solo recuperó su capacidad para realizar acrobacias complejas, sino que también fortaleció su pasión por el arte circense.
"Cada obstáculo en esta profesión es una oportunidad para aprender y crecer. Esta experiencia me enseñó a valorar cada momento en el escenario y a dar siempre lo mejor de mí", afirmó.
Ahora, como modelo a seguir para otros artistas, Suárez lleva esta lección como un recordatorio constante de su capacidad para enfrentar desafíos.
Uno de los aspectos más impresionantes de Cirque Dreams Holidaze es la coordinación necesaria para integrar los diferentes actos y disciplinas en una narrativa coherente. Suárez, quien se ha especializado en acrobacias de alto desempeño desde 2022 en este circo, destaca la manera cómo cada actuación exige absoluta concentración y precisión. El espectáculo incluye actos de equilibrio de manos y pole aéreo, disciplinas que Suárez ha perfeccionado durante más de una década.
"Las paradas de manos y las figuras de flexibilidad requieren concentración absoluta y, para mí, el verdadero desafío es mantener la precisión en cada actuación", dijo. "Es un espectáculo diseñado para todas las edades, lleno de magia, con acrobacias, música y humor. Cada actuación es un regalo para el público".
El espectáculo también se distingue por su compromiso con la innovación visual y musical, combinando una atmósfera festiva con una ejecución técnica de alto nivel.
"Este espectáculo no solo celebra la Navidad, sino que también lleva el arte circense a nuevas alturas. Es un desafío constante, pero también una oportunidad para demostrar todo lo que podemos lograr como artistas", afirmó Suárez.
Para el acróbata, integrarse en el mundo circense internacional no estuvo exento de desafíos, especialmente como hispano en una compañía de renombre mundial como Cirque du Soleil.
"Logré perfeccionar mis habilidades lingüísticas viajando de un lugar a otro; trabajar con personas de diferentes culturas me ayudó a adaptarme y aprender", señaló Suárez.
Desde joven, comprendió que para destacar en este entorno no solo debía perfeccionar su técnica, sino también desarrollar habilidades de comunicación y colaboración.
La trayectoria de Suárez lo ha llevado a trabajar en países como Canadá, Francia, Alemania y Estados Unidos, entre otros.
"Cada país tiene su propio enfoque y estilo de trabajo, y eso me enseñó a ser flexible y respetuoso con las diferencias culturales", comentó.
Estas experiencias han enriquecido su estilo artístico, permitiéndole aportar una sensibilidad única a cada espectáculo en el que participa.
Además, el oriundo de Buenos Aires enfatizó cómo su identidad hispana juega un papel importante en su carrera.
"Como argentino, llevo conmigo una pasión que se refleja en mi arte. Los latinos tenemos una energía especial que conecta con el público de una manera muy única", dijo.
Con artistas de 15 países, Cirque Dreams Holidaze es un reflejo de la diversidad y riqueza cultural que caracteriza al mundo del circo. Para Suárez, trabajar con personas de diferentes culturas ha sido una experiencia invaluable.
"Cada país tiene sus propios códigos y formas de trabajar", destacó. "Aprender a convivir, adaptarse y colaborar es esencial en este entorno".
Recuerda con especial cariño un momento que lo marcó profundamente. Durante una actuación grupal hace muchos años, en la que realizaba una rutina de cintas aéreas, uno de sus compañeros hizo un comentario divertido justo antes de subir.
"Fue algo tan espontáneo que no pude dejar de reír", recordó.
Aunque el profesionalismo es fundamental en el escenario, la situación derivó en un ataque de risa compartido entre él y su compañero, en el que intentaron mantener la compostura y el enfoque mientras continuaban su acto.
"Fue uno de esos momentos en los que no podía dejar de reír, pero el profesionalismo siempre te prepara para estas cosas", relató. Sin embargo, lejos de notarlo, el público pareció disfrutar aún más del espectáculo gracias a la química y la energía que transmitieron en el escenario.
Pero realizar acrobacias conlleva riesgos y, Suárez, lo sabe perfectamente. Un movimiento en falso puede costarle la vida. Mantener el equilibrio no es solo una cuestión técnica; es una cuestión de vida o muerte.
"Cuando estoy ahí arriba, no me enfoco en el público. Mi enfoque está en cada movimiento, en no perder el control, porque un error puede tener consecuencias graves", explicó.
Esta concentración extrema se combina con años de preparación y una rutina de calentamiento que incluye revisar cada detalle del equipo y evaluar su condición física.
En sus actos de pole aéreo y equilibrio de manos, Suárez constantemente lleva al límite su cuerpo. Realiza figuras de flexibilidad y fuerza en plataformas elevadas, donde incluso una pequeña distracción podría ser fatal.
"Siempre hay un nivel de peligro, pero es parte de lo que hacemos. Por eso, la disciplina y la preparación son esenciales", afirmó.
Suárez asegura una rigurosa revisión de seguridad antes de cada actuación, un ritual que le permite subir al escenario con confianza.
Pero a pesar de los riesgos inherentes, el bonaerense encuentra una pasión innata en el circo que se refleja en cada uno de sus espectáculos. Se toma un descanso de algunos meses en casa con su familia para recargar energías, sin dejar de entrenar ni de mantener la alimentación saludable que requiere un acróbata de alto nivel. Para él, su carrera es la prueba de que, con dedicación e ímpetu, se pueden superar los límites y convertir cada obstáculo en una oportunidad.
En su mensaje a las nuevas generaciones de artistas, enfatizó la importancia de la perseverancia. "No se rindan ante un ‘no’", instó. "Llamen a las puertas, busquen oportunidades y sigan aprendiendo. El camino puede ser difícil, pero siempre valdrá la pena".
Y agregó: "Como hispano, estoy orgulloso de llevar mi cultura al escenario y demostrar que nuestro talento no tiene fronteras. Espero que mi historia inspire a otros a creer en sí mismos y representar su identidad con orgullo.
"Yo también enfrenté muchas frustraciones por no ser seleccionado para trabajos o escuelas de circo, y, honestamente, fue muy doloroso. Pero la verdad es que, al tocar puertas y hacer preguntas —porque no nacemos sabiendo todo—, si entiendes lo suficiente y preguntas, las respuestas siempre estarán ahí. Debemos ser humildes y persistir en nuestros sueños".
INFO BOX
Cirque Dreams Holidaze
Dónde: Straz Center for The Performing Arts
Cuándo: 26-27 de diciembre
Horario: Funciones a las 3 p.m. y 7 p.m.
Duración del espectáculo: 1 hora y 41 minutos, con un intermedio de 15 minutos
Artistas en escena: Más de 30 de 15 países
Precio de boletos: Desde $47 hasta $161
Información: Strazcenter.org