Por Raquel Aché
Especial para CENTRO Tampa
¡Amados Hermanos de Luz!
Llega la conmemoración de la Independencia de los Estados Unidos de América. Celebremos este 4 de julio de 2020 con una toma de conciencia y aprendizaje que en la tierra donde se violan los derechos se pierden los beneficios de esos derechos.
¡Honrar! Sublime sentimiento unido al respeto, agradecimiento que nos permite ser grandes y continuar engrandeciendo esta nación. Honrando a nuestros antecesores inmigrantes.
Respetar esta nación amplia y generosa donde los que hemos llegado trabajamos, estudiamos, servimos y aún hay la capacidad de ayudar a los nuestros en los países de origen.
Los inmigrantes que llegamos a esta tierra de libertad y democracia debemos buscar conocer a través de su historia su pasado y presente y lograr dentro de nosotros un conocimiento que refuerce nuestra lealtad. La ciudadanía no es un pase para sacar lo mejor de este país sin siquiera aportar el respeto y las consideraciones que merecemos.
Reconocer, respetando y honrando, fundamento indispensable para exigir respeto aporte que estamos en deber de dar para continuar creciendo y ser cada vez el mejor país.
No generalizo, pero es deplorable la manera como una parte de inconscientes hermanos de una misma cultura e idioma abusan, de las bondades dadas por Estados Unidos sin ningún respeto.
Cuando recuerdo nuestra Latinoamérica, lo que sé de ella y sus orígenes, su atraso, miseria, su falta de toma de conciencia, sus tiranías, caudillismo, comunismo y otras plagas sociales para sus ciudadanos y todo lo que han causado: Que mucha de nuestra gente busca llegar a esta tierra. Se me hace difícil entender el odio con que esos tratan a esta nación.
Pretendiendo hacer de sus dificultades, errores un caos, el cual ellos mismos son causantes. Sería importante revisar las fallas de los gobernantes de nuestro piases. los únicos culpables de tanta emigración ilegal buscando otra vida.
Reclaman derechos en espacios libres, democráticos con exageradas posiciones que no dejan de ser humanas pero el derecho no se obliga se obtiene.
lo más triste de este comportamiento al proceso inmigratorio es triste cargado de vicios..
En esa búsqueda de lucha por obtener a la fuerza lo que han violado, lejos de escuchar formas de logros son presas de cañón de inescrupulosos individuos políticos. mercaderes de la miseria y la mentira. Lejos de orientar de lo que es legal, de lo que puede ser dentro del marco de la ley la generosidad y bienestar más bien les envenenan con odio incitándoles a reclamar derechos que ellos mismos han violado.
"Estados Unidos es un país de inmigrantes se oye decir". ¡Nada más cierto! y han venido y a muchos que han logrado ingresar a la sociedad después de largos años de ilegalidad trabajan y viven con sus familias engrandeciendo junto a todos nosotros esta nuestra nación.
Lo que estamos viviendo en los últimos años es una mercadería populista que lo único que han logrado es un caos y desesperanza de los que pueden tener cabida como otros tanto. Aquí estamos ante profesionales cabecillas liberales, de izquierda, comunista con intereses oscuros. Utilizando armas humanas para lograr sus intereses sin importarles este gran país.
Desde tiempos remotos llegamos y vivimos siguiendo las leyes de la legalidad gozamos de nuestros derechos. Aportamos y trabajamos libremente. También podemos ver que nuestra gente menos afortunada llegan con status al margen de la ley , trabajan, protestan, queman banderas y reclaman los mismos derechos que ellos han violentado. Esto es América la tierra de oportunidades libertad y democracia les he oído decir. Totalmente cierto, y se han logrado reformas, beneficios. No tenemos más que leer, investigar y corroborar la generosidad de los Estados Unidos de América. No solo para con todos los inmigrantes del mundo.
Cierro con esta reflexión: Además de nuestros antecesores inmigrantes, todos los que lucharon por la independencia, nuestros militares, nuestros veteranos lisiados, los desaparecidos. La Armada estadounidense, Canadá, Francia, Australia etc. y nuestros democráticos presidentes, ningún inmigrante pudiera gozar de la bondades de libertad y democracia para alcanzar nuestros sueños.
Hermanos Latinoamericanos no demos cabida, pensando que el caos que conocemos podemos exportarlo aquí. Seamos conscientes.
Dios Nos Bendiga.
Para escribirle a la columnista: alquimiaesp1@hotmail.com